La hernia discal (conocida también como desplazamiento o rotura del disco intervertebral) es una enfermedad muy común, en la cual ocurre un desplazamiento localizado de material discal más allá de los límites del espacio intervertebral. Hay varios factores que pueden desencadenar esta patología, los cuales son: • Estilo de vida (tabaquismo, falta de ejercicio regular, obesidad) • Mecánica corporal incorrecta (mala postura, manera incorrecta de levantar objetos, movimientos de torsión) • Envejecimiento natural del disco (pérdida de resistencia y elasticidad) Los síntomas generales incluyen uno o una combinación de los siguientes: • Dolor de pierna (ciática), lo que puede ocurrir con o sin dolor lumbar. Normalmente, el dolor en la pierna es peor que el dolor lumbar. • Entumecimiento, debilidad u hormigueo en la pierna. • Dolor lumbar o dolor de espalda en los glúteos. • Pérdida del control de esfínteres (poco frecuente), que puede ser una indicación de una afección médica grave llamada
El ozono al ser utilizado por vía sistémica tiene acción directa sobre los glóbulos rojos. Aumenta su capacidad de transporte de oxígeno y hace que lo cedan a los tejidos con mayor facilidad, así como también aumenta su superficie de intercambio. Además mejora sus propiedades reológicas, hay un aumento de su elasticidad, lo que les permitirá una mayor penetración a través de los capilares sanguíneos. Todo ello mejora el intercambio de sustancias entre la sangre circulante y los tejidos corporales, aumentando la presión parcial de oxígeno y la oxigenación de los tejidos, de esta forma se previenen los eventos isquémicos. Así, mejora la irrigación cerebral y el aumento de la oxigenación permite mayor producción energética (aumento de producción de ATP). Además se estimulan los sistemas de defensa antioxidante, para disminuir los daños que pudieran ocasionar las especies reactivas de oxígeno cuando no son controladas. El ozono, por su multiplicidad de acción, mejora los factores de